Razones para desconfiar de un veterinario

Razones para desconfiar de un veterinario

Desde charlatanes sin cédula profesional o titulación hasta clínicas extremadamente costosas; el mundo de los malos veterinarios es todo un tema entre los amantes de los gatos y de las mascotas en general. Aquí en Ciudad Felina te vamos a dar las principales razones para desconfiar de un veterinario, para que evites llevar a tu gato con cualquiera.

¿Qué debe haber en una clínica veterinaria?

Gato bebe y veterinario
Gato bebe y veterinario

Cuando entramos en el mundo del cuidado de las mascotas es común encontrarnos con todo tipo de personas que se hacen pasar por veterinarios, pero que no tienen los instrumentos suficientes para una tarea tan compleja como lo es atender a otro ser vivo.

Una clínica veterinaria debe tener un estándar para poder hacer frente a una emergencia; como mínimo debería contar con:

  • Un veterinario calificado como encargado o responsable de los procedimientos que se realicen en la clínica; este debe tener cédula o matrícula profesional para ejercer como veterinario, sí o sí.
  • Un espacio dedicado a la atención clínica que se encuentre aislado del resto del lugar. Por muchas razones, como la salubridad o como previsión potenciales fugas de mascotas; por mencionar algunas.
  • Un área de espera para los familiares. Es importante que el veterinario tenga un espacio donde los dueños del paciente puedan esperar mientras se realizan los procedimientos más delicados.
  • Debe contar con instrumentos veterinarios mínimos para su labor; desde una mesa de exploración hasta materiales de curación e insumos básicos para emergencias.
  • Un suministro de medicamentos mínimos para realizar procedimientos o hacer frente a alguna eventualidad.

Es importante mencionar que este es el “piso mínimo” desde el que debe partir cualquier clínica veterinaria y que de ahí hacia arriba hay un enorme camino. Además, existen veterinarios que realizan consulta a domicilio y que no tienen este tipo de instrumentos en todo momento; sin embargo, un veterinario de confianza siempre será honesto/a y si necesita trasladar al paciente a otro sitio para una exploración o un tratamiento más específico o complicado, te lo hará saber. Recuerda que razones para desconfiar de un veterinario pueden sobrar, pero razones para elogiar a un gran profesional, nunca están de más.

Características de un buen Veterinario

Gato operado casos de negligencia veterinaria
Gato para entubar y operar

Aunque las palabras “buen veterinario” son bastante subjetivas y dependen de varios factores; un veterinario de confianza siempre tendrá estos elementos mínimos al momento de dar atención a sus pacientes y por supuesto a sus dueños:

  • Es una persona consciente de la importancia que tiene tu mascota para ti. No hay nada como un veterinario que ama su trabajo y que comprende a sus pacientes y familiares.
  • Se trata de un profesional en su trabajo. Un buen veterinario tiene siempre como “bandera” el profesionalismo; aquí podemos mencionar a la ética profesional. Vamos, que un buen veterinario siempre será franco, dirá y hará todo lo posible para salvar la vida de su paciente.
  • No tiene como principal motivo de trabajo el dinero. Aunque el ser veterinario es un trabajo, no hay que dejar de lado el factor humanitario y la vocación de servicio.
  • Es apasionado/a con su trabajo. Sin pasión no tenemos nada, eso aplica no sólo para los veterinarios. El ser feliz haciendo lo que uno ama es algo que no tiene precio.
  • Le da seguimiento a sus pacientes. Recuerda que un veterinario es un profesional de la salud y siempre se agradece tener un veterinario que pregunta sobre la evolución de tu mascota. Eso hace una enorme diferencia.
LEER  Guía para cuidar gatos mayores

Existen muchas cualidades que se pueden mencionar sobre los veterinarios de calidad.

El trato al paciente – La principal razón para desconfiar de un veterinario

En su oportunidad les contaremos las historias de terror que hemos tenido que vivir al ser dueños de gatos a lo largo de estos años. Y es que es fácil encontrarse con personas que no aman lo que hacen o sencillamente lo hacen meramente por el factor económico.

El trato y el manejo que se le da a una mascota debe ser igual o mejor que el que se le da a una persona; no sólo por la cuestión humanitaria, sino por otros factores:

  • Los gatos no pueden expresar con palabras lo que están pasando. Imagina que te doliera algo y no pudieras decirlo.
  • Las mascotas en general son inocentes, no tienen una maldad predefinida.
  • No comprenden lo que les está ocurriendo o las razones por las que se les tuvo que aislar de su entorno (de su casa).
  • Ellos tienen más miedo que nosotros. Los gatos, principalmente, son criaturas de costumbres y separarlos de su ambiente es sumamente estresante para ellos.

Si tu veterinario no toma en cuenta todos estos factores o no es empático con lo que tu y tu mascota están teniendo que pasar; entonces deberías plantearte seriamente cambiar de veterinario.

Mención a parte está el maltrato animal, que también es un factor muy importante a tomar en cuenta. Si tienes una situación como esta, no dudes en denunciar.

Principales razones para desconfiar de un veterinario

Aunque son muchos los factores que se deben tomar en cuenta al momento de elegir a un veterinario, es importante tener presente que no todos los veterinarios son buenos y que existen algunos que ni siquiera son veterinarios. Entonces, para evitar algún inconveniente en la atención médica de nuestra mascota, es crucial dudar de un veterinario que:

Tiene un manejo deficiente de nuestra mascota

Un veterinario debe ser capaz de controlar los escenarios posibles, considerando factores como el estrés de nuestra mascota y sus requerimientos específicos. Vamos, que no es lo mismo manejar a un Golden Retriever que a un gato persa.

Tiene un mal trato o una atención deficiente para nosotros como dueños

Un veterinario debe ser capaz de tratar con sus pacientes y sus familiares (nosotros). No hay nada más desagradable que un veterinario insensible o déspota que no toma en cuenta el mal momento que estamos viviendo.

No cuenta con una preparación académica clara o comprobable

Todos tenemos un conocido que dice que “el hábito no hace al monje” y que conocen a un tío o a un primo que no estudió veterinaria, pero que toda su vida se ha dedicado a atender animales en el campo. Este tipo de personas no tienen una preparación comprobable y no deberían ejercer o prestar sus servicios presentándose como veterinarios. No quieras ahorrarte un dinero y ve con un profesional.

Su clínica carece de permisos – Razones para desconfiar de un veterinario

Veterinarios Razones para desconfiar de un veterinario
Saber la titulación del veterinario y su comprobación es fundamental!!!

Aunque puede resultar complicado cerciorarnos de esto, es muy importante que si tienes dudas respecto de la clínica que visitas o de sus servicios, pidas que te muestren los certificados y permisos que los acredita para poder ejercer como veterinarios. No deben negarse a mostrarlos y lo que es más importante, en caso de que detectes una irregularidad, lo hagas saber a las autoridades responsables.

LEER  Descubre los cuidados y características de un gato Devon Rex

Tiene una reputación mala o dudosa entre amigos, conocidos o en Internet

Los veterinarios, como cualquier profesional; viven de lo que la gente dice de sus servicios y su atención al cliente. Piensa en un abogado que jamás ha ganado un caso, dudarías de él para llevar tu caso, ¿cierto? Pues lo mismo ocurre con los veterinarios, con la diferencia de que estamos hablando de la salud de tu mascota; razón extra para desconfiar de un veterinario que tiene una reputación mala entre amigos, conocidos o en Internet.

No busques ahorrarte un dinero con el primer veterinario que sepas que cobra barata su primera consulta o que incluso da la primera consulta gratis, lo más importante será siempre velar por la salud de tu mascota.

No cuenta con los insumos mínimos para atender una emergencia

Si alguna vez haz tenido una emergencia médica (personal o de un familiar) sabrás que no hay una peor sensación que la de escuchar: “no tenemos material” o “no tenemos ese medicamento”. Lo mismo ocurre con el mundo de la veterinaria y es que estamos de acuerdo en que no podemos permitirnos “no contar” con los insumos básicos ante una emergencia, ¿verdad?

Si alguna vez haz tenido una mala experiencia con un veterinario que no cubra los requisitos mínimos o que carezca de material para hacer su labor, lo mejor sería que lo hicieras saber para que mejore esos aspectos o directamente cambiar de veterinario.

Solicita estudios clínicos innecesarios o excesivamente caros

Mención especial con una frase que ajusta perfecto para esta situación: “no todo lo que brilla es oro”. Si llevas tiempo en la página seguramente habrás leído la historia de Chata el día que tuvimos que llevarla al veterinario por una cuestión en vías urinarias y falta de hidratación suficiente.

En esa ocasión fuimos a una clínica veterinaria que algunos dirían que es un “hospital ángeles” para animales; y es que por lo que cobran sus consultas pareciera que lo es. En aquella oportunidad la llevamos en la noche y por una consulta nocturna los precios suelen subir (toma eso en cuenta).

Eso no es lo malo; lo malo, fue que le solicitaron una serie de estudios que en opinión de nuestra veterinaria de cabecera (que estaba enferma en aquel entonces) no eran necesarios aún, pues había que realizar otras acciones antes de hacernos gastar 150 dólares en estudios de laboratorio.

No decimos que sea un factor concluyente, pero sí es algo que debemos tomar en cuenta, pues cono decimos, no por ser una clínica cara quiere decir que todas sus decisiones son las más acertadas. En el mundo de la veterinaria también es posible encontrar lo “bueno, bonito y barato” y no por eso es de mala calidad, vamos que no todo son razones para desconfiar de un veterinario.

Razones para denunciar a un veterinario

Una mención especial dentro de estos temas es la denuncia a los veterinarios por una mala praxis. Y es que existen personas que ejercen como veterinarios y que en ocasiones no lo son. También existen otros motivos por los que uno puede plantearse no sólo dejar de llevar a nuestra mascota ahí, sino directamente denunciarlos; dentro de estas razones están:

  • Maltrata a los animales.
  • No tiene los permisos en regla.
  • Tiene una clínica veterinaria sucia o en mal estado.
  • No cuenta con una cédula profesional o matrícula para ejercer como veterinario.
  • Tiene precios desproporcionados o abusivos.

Cómo denunciar a un mal veterinario México

Aunque ya se ha abordado el tema del maltrato animal en otra publicación de nuestro sitio, no está de más colocar los sitios y direcciones a los que se puede acudir para denunciar el maltrato animal en la Ciudad de México. Estos sitios son, como mencionamos, dentro de la Ciudad de México, pero puedes buscar sus similares en tu estado, ciudad o país.

LEER  Cuidados y características de los gatos Khao Manee

Razones para desconfiar de un veterinario – Consideraciones Finales

veterinaria para gatos Razones para desconfiar de un veterinario
veterinaria para gatos Razones para desconfiar de un veterinario

Hay más recomendaciones que te pueden ayudar a detectar a un veterinario con una reputación dudosa o que directamente no son dignos de ser llamados veterinarios. La carrera o la profesión de veterinario es en buena medida una vocación. Es una profesión que se encuentra dentro del área médica y deben ser tratados con la más alta consideración.

Son profesionales que dedican sus vidas al cuidado de nuestras amadas mascotas; es por ello que hacemos un reconocimiento y una mención especial a todos esos profesionales de la salud que se hacen hasta lo imposible por salvar nuestras vidas y las de nuestras mascotas.

Si detectas alguna irregularidad dentro de las clínicas veterinarias o consideras que hay más razones para desconfiar de un veterinario, no dudes en mencionarlo en la caja de comentarios y en caso de que la irregularidad sea muy grave, denuncia. Harás un valioso servicio a la comunidad y más de uno te lo va a agradecer.

Conclusión

Es muy fácil encontrar razones para desconfiar de un veterinario, pues es común encontrarnos con charlatanes que se dedican a lucrar con la salud de personas y animales. En el mundo de la veterinaria esta situación es igual de grave y es que los animales son criaturas inocentes que no tienen la culoa de tener que lidiar con dueños irresponsables o con personas que los maltratan con tal de sacar algún beneficio económico.

Si tienes dudas respecto del veterinario que atiende a tu mascota no dudes en buscar una segunda opinión; recuerda que estamos hablado de la salud de un ser vivo y en nuestro caso, un ser vivo que es parte de la familia o que prácticamente es un hijo más.

No escatimes en los esfuerzos para buscar al veterinario ideal y recuerda que no siempre tiene que tratarse del veterinario más caro del mercado. En ocasiones es posible encontrar un servicio de calidad por una fracción del costo y con una atención de diez.

Pues bien, hemos llegado al fin de este artículo, no sin antes agradecerles por sus grandes muestras cariño y recordándoles que nos pueden compartir en sus redes sociales favoritas Facebook, Twitter e Instagram.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Subir

Este sitio web utiliza cookies para mejorar su experiencia. Si continúa utilizando este sitio asumiremos que está de acuerdo. Leer más...

error: Content is protected !!